A veces soy yo

 

sueño de amor 

A veces soy de esos paseantes por la vida,

voy soñando aunque no sueñe,

pensando aunque no piense,

andando entre las flores de parques y jardines

gastados por el tiempo

como suelas de zapatos

de andariegos peregrinos,

de soldados curtidos

en mil y dos batallas.

 

A veces solo soy una mota de polvo

en el cristal de tus olvidos,

anciana telaraña

que enreda tus legañas

y hace hielo tus fríos

con yemas de esperanza

tocando con sigilo

como lupa sin asma

o sueño de un amigo.

 

A veces me entretengo contando

las luces del destino,

las colinas de un abismo,

el hambre de los ricos,

la procesión de esporas

flotando en uno mismo,

contando las mentiras

del corazón de un niño.

 

A veces me pregunto

¿por qué tanto sigilo?

 Por qué no nos miramos

alzando nuestros gritos,

contra los que nos matan

con palabras y hechizos,

¿por qué no rebelarse contra

el amor político?

Solo somos rebaño de un lustroso paraíso.

 

A veces la respuesta no la encuentro en los libros,

aunque ponga mi vista,

aunque ponga mi oído,

Me meteré por dentro de mi ser,

llegando hasta mi alma, sin preguntar,

tan solo observaré

lo que hablan mis entrañas

y al salir, respiraré

y diré mientras calla esta boca insensata

¡Basta!

 

A veces te imagino, embebida en tus sueños,

gozando como niña al escuchar un cuento,

pensando en mi,

a ver qué digo ahora,

si verte me da fuerzas

si al oírte me derrito,

eres calma en mi guerra

mi amor, te necesito.

 

A veces, solo a veces mi corazón huido,

se esconde en el silencio

escuchando tus ruidos,

y si no los encuentro,

solo los imagino.

Eres la que enciende mi llama,

eres mi abrigo.